Un MBA puede contribuir al progreso profesional

Una de las razones más frecuentes para estudiar un MBA es que ayuda a subir el siguiente escalón en la trayectoria profesional. Tras haber trabajado durante un tiempo, algunas personas consideran que han alcanzado un cierto nivel en sus carreras y necesitan algo más para llegar a puestos directivos. Un MBA puede añadir determinadas habilidades empresariales a tu conjunto de herramientas, como el liderazgo o el pensamiento estratégico, que potenciarán tus posibilidades al solicitar puestos directivos o promociones.

Un MBA te ayuda a conocer gente

Se dice que la cuestión no es qué sabes, sino a quién conoces. Cursando un MBA puedes conocer a muchas personas, ya que estarás rodeado de catedráticos, profesores y estudiantes de todo el mundo. Las prácticas, necesarias en muchos programas de MBA, son una vía de acercamiento a las empresas y los sectores que más te interesan.

Por otra parte, la mayoría de las escuelas de negocios patrocinan eventos tipo mesas redondas o encuentros entre profesionales consolidados y alumnos ("panels" y "mixers"). Además, las escuelas organizan otras actividades de networking, donde los empresarios acuden a presentarse a los alumnos. Todo ello se convertirá en ventajas muy valiosas a la hora de buscar trabajo tras finalizar el máster.

Un MBA te permite aprender sobre otras áreas funcionales y sectores

Los estudiantes que quieran moverse de un sector a otro descubrirán que un MBA puede proporcionarles información específica necesaria en el nuevo sector. Por ejemplo, pasar del sector minorista al sector energético puede requerir conocimientos concretos sobre aspectos normativos o política energética.

De igual manera, cambiar de un área funcional como tecnología de la información a marketing, por ejemplo, puede implicar la necesidad de otro tipo de enfoque empresarial.

En ambos casos, numerosos estudiantes consideran que un MBA especializado puede ayudar a tender esos puentes.

Un MBA puede facilitarte el traslado a un nuevo lugar

Un MBA puede ser una buena forma de irte a vivir a otra ciudad o incluso a otro país. Una estancia de uno o dos años en otro país permite conocer mejor el panorama empresarial, encontrar compañías con las que te gustaría trabajar y concertar encuentros con posibles empleadores. De hecho, muchos estudiantes eligen su MBA en base a su situación geográfica, con idea de quedarse a vivir y trabajar tras finalizar el máster.

Quienes deseen establecerse en otro país deben tener en cuenta las disposiciones vigentes en materia de visados. Algunos ránkings de MBAs ordenan las escuelas en base a su “movilidad internacional”, midiendo el número o porcentaje de titulados que terminan trabajando en un país distinto al de procedencia.

Un MBA puede impulsar tu crecimiento económico

Un punto esencial es que un buen MBA puede proporcionar un aumento tangible en la nómina. De hecho, para la mayoría de los ránkings más fiables de MBAs el “incremento del sueldo” tras el MBA es uno de los principales parámetros para comparar la calidad de una escuela respecto a otra.